Tamy Henríquez
Pere Marqués Graells en su
disertación del año 2001 sobre los USOS EDUCATIVOS DE INTERNET ¿HACIA UN
NUEVO PARADIGMA DE LA ENSEÑANZA? resultó sin duda alguna un profeta que
visualizó con mucho acierto el camino del internet y su potente influencia en
la vida humana. El paso de estos 23 años desde que dejó plasmadas sus ideas
sobre el devenir del internet para la humanidad quedó corto, pero no por mucho.
Sus sentencias no alcanzaron a visualizar la monetización gracias al uso de la
herramienta y “sus derivados” como Instagram y tiktok, como tampoco, la
estructuración de una red de inteligencia artificial que, a pesar de nacer
desde el mismo seno del internet, no implica el hecho que desde allí la gente
se forme como corresponde. Por lo menos no los que pretenden el uso
irresponsable de las maravillosas herramientas adquiridas gracias al uso de ese
Dios que no se ve, pero se siente. Y es que, ciertamente el mundo gira
alrededor de esta poderosa herramienta, de manera que aquel que pretenda
voltear su rostro para no ser contaminado o negarse siquiera a su uso porque su
permeabilidad intelectual no le permite adentrarse en ese mundo, pues
sencillamente no vivirá, porque hasta para comer requerirá de sus beneficios
porque en breve, de otra forma no podrá adquirir sus alimentos.
En educación, el área que nos
compete, creo que aún queda mucho por decir. La infinidad de estrategias que
han surgido y que están por hacerlo para formar al individuo son tan diversas,
como seres humanos hay para crearlas. Aún persiste, en mi criterio, un recelo
por entregarse plenamente al aprendizaje y a la enseñanza virtual. Siento que la
presencialidad sigue su lucha frontal contra la virtualidad o será muy
posiblemente una proyección esta afirmación porque mi experiencia con ella no
resultó todo lo satisfactoria que esperé, aunque reconozco que fue forzada que
no solicitada y ese aspecto es de vital importancia según mi creencia. Así como
la evaluación de los aprendizajes virtuales representa una limitante para el
docente porque no ve la comunicación no verbal de su estudiante, igualmente el
aprendizaje virtual es una limitante para el alumno porque no siente la fuerza
motivadora de su docente.
Las impresiones de Pere Marques
después del paso del tiempo son muy interesantes. Claro que, en general sus
consideraciones siempre apuntan hacia la responsabilidad tanto en el que forma
como en el que intenta formarse así como en las condiciones mínimas necesarias
para que se produzca la enseñanza como lo son: sujetos motivados a enseñar y
sujetos motivados a aprender; la existencia de equipos adecuados, una señal y
un servicio eléctrico estables, será que ¿en Venezuela podemos? Creo que sí.
Por eso estoy aquí, motivada y empeñada en formarme para enseñar.
Referencias:
PERE, Marques. (2001). Usos educativos de Internet ¿Hacia un nuevo paradigma de la enseñanza?
Vista de La inteligencia artificial en educación. (s.f.). RACO – RACO. https://raco.cat/index.php/DIM/article/view/417333/511810
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